TIEMPO DE LECTURA: 14 min

Un descubrimiento que podría cambiar la lucha contra el cáncer de mama

Foto de Robinson Lalos
Robinson Lalos
Editor Senior
Un descubrimiento que podría cambiar la lucha contra el cáncer de mama

Un Avance Revolucionario: Eliminan las Células Dormidas que Causan Recaídas en el Cáncer de Mama

Células cancerosas en un entorno de investigación

A pesar de los avances significativos en el diagnóstico y tratamiento del cáncer de mama, la recaída sigue siendo uno de los mayores temores para pacientes y oncólogos. Se estima que entre el 20% y el 40% de las personas que han superado esta enfermedad experimentarán una recaída en los años siguientes, una cifra que representa una sombra persistente sobre la celebración de la remisión.

Un avance que cambia las reglas del juego

Ahora, un equipo de investigadores del Centro Oncológico Abramson de la Universidad de Pennsylvania ha logrado lo que muchos consideraban imposible: identificar y eliminar las células tumorales latentes que causan estas recaídas. Este hallazgo, publicado en la prestigiosa revista Nature Medicine, podría transformar radicalmente el enfoque del tratamiento del cáncer de mama y ofrecer una nueva esperanza a millones de supervivientes en todo el mundo.

La investigación no solo representa un avance científico significativo, sino también un cambio paradigmático en cómo entendemos y abordamos el cáncer. Por primera vez, los médicos tienen una herramienta potencial para prevenir la recaída antes de que ocurra, en lugar de tratarla una vez que se manifiesta. Este enfoque proactivo podría marcar el comienzo de una nueva era en la oncología, donde la prevención de la recaída se convierta en un objetivo tan importante como la eliminación del tumor inicial.

Células Dormidas: El Enemigo Oculto

Representación de células tumorales latentes

Para comprender la magnitud de este avance, es fundamental entender qué son las células tumorales latentes y por qué representan un desafío tan significativo en el tratamiento del cáncer. Estas células, también conocidas como enfermedad mínima residual (ERM), son células cancerosas que sobreviven al tratamiento inicial y permanecen en el cuerpo en estado de latencia, sin dividirse activamente ni mostrar signos de actividad.

Invisibles e indetectables

Lo que hace a estas células particularmente peligrosas es su capacidad para evadir los métodos convencionales de detección. Al no estar activamente proliferando, no son visibles en las pruebas de imagen estándar como mamografías, resonancias magnéticas o TAC. Además, pueden permanecer en este estado de latencia durante años o incluso décadas antes de reactivarse repentinamente y provocar una recaída, a menudo en forma de enfermedad metastásica, que es mucho más difícil de tratar.

Las células tumorales latentes suelen refugiarse en lugares distantes del tumor original, como la médula ósea, donde pueden evadir el sistema inmunológico y los tratamientos convencionales. Lo que es aún más preocupante es que estas células tienen mecanismos de supervivencia completamente diferentes a los de las células tumorales activas, lo que explica por qué los tratamientos que son efectivos contra los tumores en crecimiento no funcionan contra ellas.

Esquema del cáncer de mama y sus metástasis

El riesgo de recaída varía según el tipo de cáncer de mama. Los tumores triple negativo y HER2+ tienden a reaparecer en los primeros años después del tratamiento, mientras que los cánceres con receptores hormonales positivos (ER+) pueden recaer décadas después. Esta imprevisibilidad crea una constante incertidumbre para los pacientes, que viven con el temor persistente de que el cáncer pueda volver en cualquier momento.

"El temor persistente a la reaparición del cáncer es algo que se cierne sobre muchas sobrevivientes de cáncer de mama después de celebrar el final del tratamiento. Actualmente, simplemente desconocemos cuándo o si el cáncer volverá a aparecer; ese es el problema que nos propusimos resolver." - Angela DeMichele, investigadora principal del estudio

La Investigación Pionera de la Universidad de Pennsylvania

Células bajo microscopio fluorescente

El equipo de investigadores de la Universidad de Pennsylvania, liderado por la doctora Angela DeMichele y el doctor Lewis Chodosh, pasó años estudiando los mecanismos biológicos que permiten a las células tumorales latentes sobrevivir en estado de dormancia. Su objetivo era identificar las vías de señalización específicas que mantienen vivas a estas células y desarrollar una estrategia para atacarlas selectivamente sin dañar las células sanas.

Un enfoque innovador

Lo que distingue esta investigación es su enfoque preventivo. En lugar de centrarse en tratar el cáncer una vez que ha reaparecido, los científicos se propusieron intervenir durante la fase de latencia, cuando las células son más vulnerables. Esta estrategia representa un cambio fundamental en la oncología, pasando de un enfoque reactivo a uno proactivo que busca prevenir la recaída antes de que ocurra.

La investigación se desarrolló en dos fases. En primer lugar, se realizaron experimentos preclínicos en modelos de ratón para comprender mejor los mecanismos subyacentes que permiten la supervivencia de las células latentes. En esta etapa, los investigadores identificaron dos vías celulares clave: la autofagia y la señalización de mTOR, que resultaron ser fundamentales para la supervivencia de estas células.

Investigador trabajando en un laboratorio con datos de cáncer

Tras identificar estas vías, el equipo probó numerosos compuestos para encontrar aquellos que pudieran bloquear eficazmente estos mecanismos de supervivencia. Finalmente, seleccionaron dos fármacos ya aprobados por la FDA para otras enfermedades: la hidroxicloroquina y el everolimus. Esta elección fue estratégica, ya que al ser medicamentos ya conocidos, se aceleraría significativamente el proceso de aprobación para su uso en pacientes con cáncer de mama.

"Sorprendentemente, descubrimos que medicamentos que no muestran eficacia contra tumores en crecimiento activo sí pueden exterminar las células durmientes. Esto nos indica que la biología de las células tumorales latentes es muy diferente a la de las células cancerosas activas." - Lewis Chodosh, presidente de Biología del Cáncer en la Universidad de Pennsylvania

El Ensayo CLEVER: Diseño y Metodología

Investigadora en un laboratorio médico

Con los resultados prometedores obtenidos en los modelos preclínicos, el equipo de la Universidad de Pennsylvania diseñó el ensayo clínico CLEVER (Clinical Evaluation of Everolimus and Hydroxychloroquine in Residual Disease), con el objetivo de evaluar la eficacia de estos fármacos en pacientes humanos. Este ensayo de fase II representó un hito importante, ya que fue el primero en demostrar la posibilidad de identificar y tratar selectivamente las células tumorales latentes en pacientes con cáncer de mama.

Selección de participantes

Para el ensayo se seleccionaron 51 mujeres que habían completado su tratamiento inicial contra el cáncer de mama en los cinco años anteriores y cuyas exploraciones de seguimiento estaban limpias. Lo que hacía a estas participantes especiales es que todas ellas presentaban células tumorales latentes en su médula ósea, detectadas mediante un análisis específico. Este criterio de selección fue crucial, ya que permitió enfocar el tratamiento en aquellas pacientes con mayor riesgo de recaída.

Las participantes se dividieron en tres grupos: uno recibió hidroxicloroquina, otro recibió everolimus, y el tercero recibió una combinación de ambos fármacos. Todos los grupos completaron seis ciclos de tratamiento, con un seguimiento posterior para evaluar la presencia de células latentes y la posible reaparición del cáncer.

Esquema del mecanismo de metástasis del cáncer de mama

Uno de los aspectos más innovadores del ensayo fue el método utilizado para detectar las células tumorales latentes. En lugar de depender de las pruebas de imagen convencionales, los investigadores realizaron análisis de médula ósea, una técnica más invasiva pero mucho más precisa para identificar estas células esquivas. Este enfoque permitió confirmar la presencia de células latentes antes del tratamiento y verificar su eliminación después.

"Nuestra investigación demuestra que esta fase latente representa una oportunidad para intervenir y erradicar las células tumorales latentes antes de que puedan reaparecer como enfermedad metastásica agresiva." - Lewis Chodosh

Los Fármacos Clave: Hidroxicloroquina y Everolimus

Envase de Everolimus 10 mg

La elección de la hidroxicloroquina y el everolimus para este ensayo no fue casual. Ambos fármacos tienen mecanismos de acción complementarios que atacan las vías celulares esenciales para la supervivencia de las células tumorales latentes. Lo más interesante es que ninguno de los dos fue desarrollado originalmente para tratar el cáncer, lo que demuestra cómo la reutilización de medicamentos existentes puede acelerar el desarrollo de nuevas terapias.

Hidroxicloroquina: De la malaria al cáncer

La hidroxicloroquina es un fármaco que ganó notoriedad mundial durante la pandemia de COVID-19, aunque su uso principal original era como tratamiento para la malaria. Su mecanismo de acción en el contexto del cáncer radica en su capacidad para inhibir la autofagia, un proceso celular mediante el cual las células reciclan sus propios componentes para sobrevivir en condiciones de estrés. Las células tumorales latentes dependen especialmente de la autofagia para mantenerse vivas en estado de dormancia, por lo que bloquear este proceso las deja vulnerables.

Pastillas de Hidroxicloroquina

Por otro lado, el everolimus es un inhibidor de mTOR, una molécula que juega un papel crucial en la regulación del crecimiento y proliferación celular. Aunque originalmente desarrollado como inmunosupresor para prevenir el rechazo de órganos trasplantados, posteriormente se aprobó para tratar ciertos tipos de cáncer. En el contexto de las células tumorales latentes, el everolimus interfiere con las señales que les permiten permanecer en estado de dormancia y sobrevivir a largo plazo.

Sinergia complementaria

Lo que hace especialmente efectiva la combinación de estos dos fármacos es que atacan mecanismos complementarios. Mientras la hidroxicloroquina inhibe la autofagia, el everolimus bloquea la señalización de mTOR. Juntos, crean un "doble ataque" que deja a las células tumorales latentes sin recursos para sobrevivir. Esta sinergia explica por qué la combinación de ambos fármacos mostró resultados superiores a cada uno por separado en el ensayo clínico.

"La diferencia de comportamiento entre las células latentes y las activas abre un nuevo panorama para desarrollar terapias específicas. Necesitamos medicamentos diseñados específicamente para atacar estas células durmientes, no solo los tumores en crecimiento activo." - Angela DeMichele

Resultados Espectaculares: Eliminando las Células Latentes

Pacientes de cáncer de mama

Los resultados del ensayo CLEVER superaron todas las expectativas. Después de completar los seis ciclos de tratamiento, los investigadores realizaron nuevos análisis de médula ósea para evaluar la presencia de células tumorales latentes. Los hallazgos fueron extraordinarios: en el 80% de las participantes, las células latentes habían desaparecido por completo.

Tasas de supervivencia sin precedentes

Pero lo más impresionante fueron los resultados a largo plazo. Después de 42 meses de seguimiento, solo dos de las 51 participantes experimentaron una recaída. La tasa de supervivencia libre de enfermedad superó el 90% en las pacientes que recibieron un solo fármaco y alcanzó el 100% en aquellas que recibieron la combinación de hidroxicloroquina y everolimus. Estas cifras son extraordinarias si se comparan con las tasas de recaída habituales en pacientes con células tumorales latentes detectables.

Estos resultados son particularmente significativos porque demuestran por primera vez que es posible no solo detectar selectivamente a los pacientes con mayor riesgo de recaída, sino también intervenir eficazmente para prevenir esa recaída. El ensayo CLEVER establece un precedente importante en la oncología, abriendo la puerta a una nueva era de tratamientos preventivos dirigidos a las células tumorales latentes.

Simbolos de concienciación sobre el cáncer de mama

Es importante destacar que los tratamientos fueron bien tolerados por las participantes, con efectos secundarios manejables. Esto es crucial, ya que cualquier terapia preventiva debe tener un perfil de seguridad excelente para que sea viable administrarla a pacientes que, en teoría, están libres de enfermedad.

"Queremos ofrecer una alternativa que supere la incertidumbre constante tras finalizar el tratamiento, una vía que dé a las pacientes esperanza de dejar atrás la enfermedad." - Angela DeMichele

Implicaciones para el Futuro del Tratamiento del Cáncer

Esquema de vías de señalización celular

El éxito del ensayo CLEVER tiene implicaciones que van mucho más allá del tratamiento del cáncer de mama. Esta investigación abre nuevas vías para abordar uno de los mayores desafíos en oncología: la prevención de las recaídas. Los principios y métodos desarrollados por el equipo de la Universidad de Pennsylvania podrían aplicarse a otros tipos de cáncer donde las células tumorales latentes también juegan un papel crucial en la recaída.

Aceleración hacia la clínica

Una de las ventajas más significativas de este enfoque es que, al utilizar fármacos ya aprobados, el camino hacia su aplicación clínica es mucho más corto. Los investigadores ya han iniciado dos ensayos adicionales (ABBY y PALAVY) para ampliar el alcance de los resultados y validar estos hallazgos en poblaciones más grandes y diversas. Si estos estudios confirman los resultados iniciales, esta terapia podría estar disponible para los pacientes en un tiempo relativamente corto.

Además, esta investigación representa un cambio de paradigma en cómo entendemos y abordamos el cáncer. En lugar de centrarnos exclusivamente en eliminar los tumores visibles, este enfoque reconoce la importancia de tratar también las células cancerosas invisibles que pueden causar recaídas en el futuro. Esta visión más holística podría transformar la práctica oncológica en los próximos años.

Mecanismo de acción de inhibidores en células cancerosas

La investigación también tiene implicaciones importantes para la calidad de vida de los supervivientes de cáncer. Al reducir drásticamente el riesgo de recaída, esta terapia podría aliviar la carga psicológica que acompaña a la vida después del cáncer, permitiendo a los pacientes mirar hacia el futuro con menos miedo e incertidumbre. Este aspecto psicológico es crucial, ya que el miedo a la recaída puede tener un impacto significativo en la salud mental y el bienestar general de los supervivientes.

"Esta fase representa una ventana de oportunidad para intervenir y erradicar las células tumorales latentes antes de que puedan reaparecer como enfermedad metastásica agresiva." - Lewis Chodosh

Conclusiones: Un Rayo de Esperanza

Células de cáncer de mama bajo microscopio

La investigación de la Universidad de Pennsylvania representa un hito en la lucha contra el cáncer de mama. Por primera vez, los científicos han demostrado que es posible identificar y eliminar las células tumorales latentes que causan las temidas recaídas. Este avance no solo ofrece nuevas esperanzas a los millones de personas que han sobrevivido al cáncer de mama, sino que también abre nuevas vías para abordar otros tipos de cáncer donde las células latentes juegan un papel importante.

Más allá del cáncer de mama

Los principios y métodos desarrollados en esta investigación podrían aplicarse a otros tipos de cáncer donde las células tumorales latentes también causan recaídas, como:

Cáncer de próstata: Donde las células latentes pueden permanecer ocultas durante años antes de reactivarse.

Cáncer colorrectal: Que también presenta altas tasas de recaída después del tratamiento inicial.

Leucemias: Donde células leucémicas residuales pueden causar recaídas incluso después de la remisión completa.

Este avance también subraya la importancia de la investigación básica en la lucha contra el cáncer. Sin el conocimiento fundamental sobre los mecanismos biológicos que permiten a las células tumorales latentes sobrevivir, nunca habría sido posible desarrollar esta terapia. Es un recordatorio de que, aunque los avances clínicos son cruciales, la investigación básica es el cimiento sobre el que se construyen todos los tratamientos innovadores.

Un futuro más esperanzador

Para los millones de personas que viven con el temor constante a la recaída después del cáncer, esta investigación representa un rayo de esperanza. Aunque aún se necesitan más estudios para confirmar estos resultados en poblaciones más grandes, el ensayo CLEVER demuestra que es posible transformar el enfoque del cáncer de uno reactivo a uno preventivo. En el futuro, el tratamiento del cáncer podría incluir no solo la eliminación del tumor inicial, sino también la erradicación de las células latentes para prevenir la recaída, ofreciendo a los pacientes una verdadera oportunidad de dejar la enfermedad atrás.

"Nuestro estudio demuestra que prevenir la recurrencia mediante el control y la focalización de las células tumorales latentes es una estrategia muy prometedora, y espero que impulse más investigaciones en esta área." - Angela DeMichele

En conclusión, la eliminación de las células dormidas que causan recaídas en el cáncer de mama representa uno de los avances más significativos en la oncología de las últimas décadas. Este descubrimiento no solo ofrece nuevas esperanzas a los pacientes, sino que también abre un nuevo capítulo en nuestra comprensión y tratamiento del cáncer. Aunque aún queda camino por recorrer, este avance nos acerca un paso más a un futuro donde el cáncer no solo sea tratable, sino verdaderamente curable.

Publicado el 5/9/2025

Compartir este artículo: