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Apple y Google: la alianza inesperada para salvar a Siri

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Robinson Lalos
Editor Senior
Apple y Google: la alianza inesperada para salvar a Siri

En el competitivo mundo de la inteligencia artificial, donde cada día surgen nuevas innovaciones que parecen sacadas de la ciencia ficción, Apple se encuentra en una posición inesperada: la de rezagado. La compañía que revolucionó la industria tecnológica con productos como el iPhone, el iPad y el MacBook, ahora lucha por mantenerse relevante en el campo de la IA generativa. Y en el centro de esta batalla se encuentra Siri, el asistente de voz que una vez fue pionero pero que hoy parece un dinosaurio tecnológico.

Logos de diferentes asistentes de IA incluyendo Siri y Gemini

Lo que hace esta historia aún más fascinante es que Apple, conocida por su filosofía de control vertical y desarrollo propio, estaría considerando una alianza con su archirrival Google para rescatar a Siri. Según informes de Bloomberg y otras fuentes, Apple ha iniciado conversaciones con Google para utilizar Gemini, su modelo de inteligencia artificial, como el motor de la próxima generación de Siri. Una alianza que, de materializarse, cambiaría por completo las reglas del juego en la industria tecnológica.

15 años de decepciones

Presentado en 2011, Siri fue el primer asistente de voz masivo para smartphones. Sin embargo, mientras sus competidores como Google Assistant y Alexa evolucionaban rápidamente, Siri se estancó. Hoy, casi 15 años después, el asistente de Apple sigue siendo incapaz de entender comandos complejos, mantener conversaciones coherentes o integrarse eficazmente con aplicaciones de terceros. Un fracaso que se ha vuelto cada vez más evidente con el auge de la IA generativa.

Pero, ¿cómo llegamos a este punto? ¿Qué llevó a Apple, una de las empresas más poderosas del mundo, a considerar depender de su competencia para salvar uno de sus productos más emblemáticos? En este artículo, exploraremos la crisis interna de IA en Apple, las negociaciones con Google, las alternativas sobre la mesa y las implicaciones de esta improbable alianza que podría cambiar el futuro de la inteligencia artificial en nuestros dispositivos.

La crisis de IA en Apple: Un gigante tambaleante

Para entender por qué Apple está considerando una alianza con Google, primero debemos comprender la magnitud de la crisis interna que enfrenta la compañía en el campo de la inteligencia artificial. Según múltiples informes y filtraciones, Apple se encuentra en una situación crítica que amenaza su posición como líder en innovación tecnológica.

Iconos de Siri y Gemini

Subestimando el tsunami de la IA generativa

La Navidad de 2022 marcó un punto de inflexión para Craig Federighi, vicepresidente de software de Apple. Durante esas vacaciones, exploró a fondo Microsoft Copilot, una IA generativa impulsada por ChatGPT, y según informes, "alucinó al ver sus capacidades". El problema es que para entonces ya era demasiado tarde. Mientras OpenAI, Microsoft y otras empresas habían invertido años y miles de millones en desarrollar IA generativa, Apple se había quedado atrás, subestimando la velocidad a la que esta tecnología avanzaría.

La falta de previsión no fue el único problema. El departamento financiero de Apple, liderado por el CFO, no autorizó el aumento de inversión necesario para competir en el campo de la IA. John Giannandrea, quien fuera jefe de IA en Apple hasta hace unos meses, solicitó en 2023 un aumento de presupuesto para adquirir más GPUs, pero su petición fue denegada. En ese momento, Apple apenas contaba con 50.000 unidades de procesamiento gráfico con más de cinco años de antigüedad, una cantidad insuficiente para desarrollar una tecnología puntera que les pusiera a la altura de sus competidores.

50,000
GPUs con más de 5 años de antigüedad en los centros de datos de Apple

La crisis se profundizó con la pérdida de talentos clave. En julio de este año, Ruoming Pang, arquitecto principal del grupo de modelos de IA, abandonó Apple para unirse a Meta Platforms con un paquete de 200 millones de dólares. Su salida provocó un éxodo de colaboradores que lo siguieron, debilitando aún más el equipo de IA de la compañía. Ante la posibilidad de tercerizar la tecnología central, otros miembros también están valorando abandonar la compañía, atraídos por ofertas millonarias en la industria tecnológica.

Problemas de comunicación interna

Según Mark Gurman, analista de Bloomberg, los problemas de Apple van más allá de la falta de inversión o talento. Los departamentos de marketing, finanzas, software e inteligencia artificial parecían ir por distintos caminos sin un liderazgo claro, lo que les ha llevado a precipitarse anunciando novedades que aún no estaban listas. Este descoordinamiento interno culminó en el bochorno público cuando Apple tuvo que anunciar el retraso de la nueva Siri, prevista inicialmente para la primavera de 2025, y que ahora no llegaría hasta 2026.

Como resultado de esta crisis, Apple ha reestructurado sus departamentos clave en materia de inteligencia artificial. John Giannandrea, jefe de IA desde su flamante fichaje en 2018, ha sido apartado del proyecto Siri. En su lugar, Craig Federighi (responsable de software) y Mike Rockwell (creador del Vision Pro) ahora lideran el desarrollo del asistente. Un cambio que refleja la urgencia de la situación y la necesidad de resultados concretos.

Negociaciones secretas: Apple y Google en la mesa

En medio de esta crisis, Apple ha tomado una decisión sorprendente: acercarse a su archirrival Google para explorar una posible colaboración. Según informes de Bloomberg, Reuters y otros medios de alto prestigio, Apple ha iniciado conversaciones con Alphabet Inc. (la matriz de Google) para utilizar Gemini como el corazón de la próxima versión de Siri, prevista para estrenarse en 2025.

Logo de Apple combinado con Gemini

Un proceso en etapas iniciales

Las conversaciones entre ambas empresas todavía se encuentran en una etapa inicial, pero ya han avanzado lo suficiente como para que Google haya comenzado a entrenar una versión personalizada de Gemini que podría funcionar en los servidores de Apple. Según fuentes familiarizadas con el asunto, la decisión final podría tomarse en varias semanas, aunque Apple todavía está evaluando si mantener su línea de desarrollo propio o dar paso a la tecnología de un socio externo.

La noticia de estas negociaciones tuvo un impacto inmediato en Wall Street. Las acciones de Google subieron un 3.7% tras conocerse la información, mientras que las de Apple aumentaron un 1.6%, reflejando la confianza de los inversores en que una alianza entre ambas empresas podría beneficiar a ambas. Para Google, representaría una victoria estratégica al colocar su tecnología de IA en uno de los ecosistemas más grandes del mundo. Para Apple, sería una forma de acortar la brecha con sus competidores en el campo de la IA generativa.

Privacidad y control: Los desafíos técnicos

En caso de llegar a un pacto, los modelos de Gemini operarían en los servidores Apple Private Cloud Compute, que emplean procesadores Mac para gestionar el procesamiento de IA de manera remota. Esto significa que los modelos de Google no correrían directamente en los dispositivos de los usuarios, lo que permitiría a Apple mantener cierto control sobre la privacidad y seguridad de los datos, un pilar fundamental de su filosofía empresarial.

Esta posible alianza no es la primera colaboración entre Apple y Google. Ambas empresas mantienen un acuerdo multimillonario por el cual Google paga a Apple miles de millones de dólares anuales para que su buscador sea el predeterminado en dispositivos iOS. Un acuerdo que actualmente está bajo el escrutinio de las autoridades antimonopolio estadounidenses, lo que podría complicar aún más cualquier nueva colaboración entre las empresas.

"Apple está en una crisis de inteligencia artificial. La posibilidad de que dependan de Gemini para salvar a Siri es una admisión tácita de que sus desarrollos internos no han sido suficientes." - Mark Gurman, analista de Bloomberg

Más opciones sobre la mesa: Anthropic y OpenAI

Aunque las negociaciones con Google han captado la mayor parte de la atención, Apple está explorando otras alternativas para potenciar la nueva versión de Siri. La compañía no quiere depender de un único socio y está manteniendo conversaciones con otros actores clave en el campo de la IA generativa.

Comparación entre los logos de Gemini y Apple Intelligence

Anthropic: Una opción fuerte pero costosa

Una de las alternativas que Apple está considerando es Anthropic, la empresa detrás del modelo de lenguaje Claude. Según fuentes internas, directivos de Apple consideraban a Anthropic como un candidato fuerte para asociarse, debido a la calidad de su tecnología y su enfoque en la seguridad y alineación de la IA. Sin embargo, las condiciones económicas exigidas por Anthropic llevaron a Apple a abrir el abanico de opciones y explorar otras alternativas, incluyendo la conversación con Google.

Otra opción sobre la mesa es OpenAI, la compañía detrás del revolucionario ChatGPT. De hecho, Apple ya tiene un acuerdo con OpenAI para que ChatGPT sirva como respaldo de Siri ante consultas generales, un ámbito en el que el asistente de Apple ha mostrado históricamente debilidades. Esta colaboración existente podría facilitar una integración más profunda de la tecnología de OpenAI en la nueva versión de Siri.

La competencia interna: Linwood vs Glenwood

Mientras explora opciones externas, Apple también mantiene viva la posibilidad de desarrollar su propia tecnología. Dentro de la compañía se desarrolla una competencia interna entre dos versiones de un futuro Siri: una, llamada "Linwood", utiliza modelos internos desarrollados por el equipo de Apple Foundation Models, y la otra, "Glenwood", operaría con tecnología de terceros. Esta dualidad refleja la incertidumbre estratégica de Apple y su deseo de no abandonar completamente su filosofía de desarrollo propio.

El equipo de Apple Foundation Models ha desarrollado los modelos de lenguaje que potencian funciones como resúmenes automáticos de texto y creación de emojis personalizados, características que ya forman parte de Apple Intelligence. Sin embargo, estos modelos no han demostrado ser suficientemente potentes como para sustentar una versión de Siri verdaderamente competitiva con las ofertas de Google, OpenAI o Anthropic.

Algunos responsables de ingeniería de Apple incluso han planteado la posibilidad de reemplazar los modelos para funciones de IA distintas a Siri en los dispositivos de la compañía, lo cual supondría una ruptura considerable respecto a la política tradicional de Apple, que apuesta por desarrollar y operar sus propias funciones de IA para preservar la seguridad y privacidad de los usuarios. Sin embargo, actualmente no existe un plan activo para implementar ese cambio a gran escala.

Implicaciones de una alianza histórica

La posible alianza entre Apple y Google para potenciar Siri con Gemini trasciende el simple desarrollo de un producto. De materializarse, tendría profundas implicaciones para ambas empresas, para la industria tecnológica en general y para los millones de usuarios que dependen de estos asistentes de voz en su vida diaria.

Logo de Gemini con líneas de energía

Beneficios estratégicos para ambas empresas

Para Google, una alianza con Apple representaría una victoria estratégica masiva. No solo por los ingresos que podría generar, sino por el prestigio de tener su tecnología de IA en uno de los ecosistemas más grandes del mundo. Además, le permitiría competir más eficazmente contra Microsoft y OpenAI, que ya han establecido alianzas con otros fabricantes de dispositivos.

Para Apple, los beneficios son igualmente significativos. Integrar Gemini le permitiría acortar drásticamente la brecha con sus competidores en el campo de la IA generativa, ofreciendo a los usuarios una experiencia mucho más potente y coherente. Además, le daría tiempo para seguir desarrollando sus propios modelos de IA sin la presión de tener que lanzar un producto inmaduro al mercado.

Sin embargo, la alianza también conlleva riesgos importantes para Apple. La compañía ha construido su reputación sobre el control total de su ecosistema y la protección de la privacidad de los usuarios. Depender de la tecnología de Google podría percibirse como una contradicción con estos principios, especialmente considerando el historial de Google en materia de recolección de datos para publicidad.

Obstáculos regulatorios y antimonopolio

Cualquier acuerdo entre Apple y Google enfrentará un escrutinio regulatorio intensivo. Ambas empresas ya están bajo la lupa de las autoridades antimonopolio en varios países por su acuerdo existente sobre el buscador predeterminado en iOS. Una nueva colaboración en el campo de la IA generativa podría aumentar aún más las preocupaciones sobre el poder de mercado de estas empresas y su capacidad para sofocar la competencia.

Para los usuarios, una alianza entre Apple y Google podría traducirse en una experiencia de Siri significativamente mejorada, con capacidades de comprensión del lenguaje natural, ejecución de tareas complejas e integración con aplicaciones de terceros muy superiores a las actuales. Sin embargo, también podría generar preocupaciones sobre privacidad y seguridad de los datos, especialmente si la información de los usuarios es procesada por los servidores de Google.

2026
Año previsto para el lanzamiento de la nueva Siri, según Mark Gurman

Más allá de Apple y Google, una alianza de esta naturaleza podría cambiar por completo el panorama competitivo en la industria de la IA. Podría acelerar la consolidación del mercado, con empresas más pequeñas luchando por competir contra los gigantes tecnológicos que controlan tanto el hardware como el software. También podría establecer un precedente para otras colaboraciones entre competidores en el campo de la IA generativa.

El futuro de Siri: ¿Resurgimiento o adiós definitivo?

Mientras las negociaciones continúan y Apple evalúa sus opciones, una pregunta permanece en el aire: ¿cuál es el verdadero futuro de Siri? ¿Podrá el asistente de voz de Apple resurgir de sus cenizas y convertirse en el competidor formidable que una vez se prometió, o está destinado a ser reemplazado por tecnología externa?

Dedo tocando el icono de Gemini en un teléfono

Un largo camino por recorrer

Según Mark Gurman, la nueva Siri no debutará hasta 2026, probablemente en primavera y con una versión intermedia de iOS 26. Sin embargo, desde Apple guardan un precabado silencio y no dan fechas exactas, más allá de deslizar que llegará "en algún momento del próximo año". Esta incertidumbre refleja los desafíos técnicos y estratégicos que la compañía aún enfrenta, incluso con la posible ayuda de socios externos.

Pese a la negativa pública de ejecutivos como Craig Federighi, Apple sí está trabajando en un LLM (Large Language Model) propio con el que traer una Siri equiparable a ChatGPT. Según trabajadores de Apple que están probándolo, este modelo iguala en capacidades al de OpenAI, aunque al final no es más que una opinión sesgada y, probablemente, interesada. Este nuevo avance sí que podría demorarse aún más, y raro será verlo antes de iOS 27.

El dilema estratégico de Apple

Apple se encuentra en una encrucijada estratégica. Por un lado, tiene la oportunidad de asociarse con los líderes en IA generativa y ofrecer a sus usuarios una experiencia de primera clase rápidamente. Por otro lado, arriesga perder una de sus ventajas competitivas más importantes: el control total de su ecosistema y la integración perfecta entre hardware y software.

La decisión que tome Apple en las próximas semanas definirá no solo el futuro de Siri, sino también su posición en la carrera de la IA generativa. Una alianza con Google podría ser un parche temporal que solucione sus problemas inmediatos, pero también podría sentar las bases para una dependencia a largo plazo de tecnología externa.

Para los usuarios, la espera continúa. Mientras tanto, competidores como Google Assistant, Alexa y ChatGPT siguen avanzando, ofreciendo capacidades cada vez más impresionantes. La pregunta es si, cuando finalmente llegue la nueva Siri, ya será demasiado tarde. Como señalan muchos analistas, para Apple en el campo de la IA, hace tiempo que ya es tarde.

"La duda es si llegará demasiado tarde. De momento, para muchos, hace tiempo que ya es tarde." - Análisis sobre la situación de Siri y la IA de Apple

En última instancia, la historia de Siri refleja un desafío más amplio para Apple: cómo mantener su posición como líder en innovación tecnológica en un mundo donde la IA generativa está cambiando rápidamente las reglas del juego. La posible alianza con Google podría ser el principio de una nueva era para Siri, o simplemente el reconocimiento de que Apple necesita ayuda para competir en un campo que, por ahora, parece dominar su archirrival.

Publicado el 22/8/2025

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