Esperanza en Páncreas: Técnica Pionera en Bellvitge Ofrece Opción Quirúrgica a Casos Inoperables

Esperanza en Páncreas: Técnica Pionera en Bellvitge Ofrece Opción Quirúrgica a Casos Inoperables

Una innovadora estrategia quirúrgica combinada con quimioterapia neoadyuvante, liderada por el Hospital de Bellvitge, abre una nueva ventana para pacientes con cáncer de páncreas localmente avanzado.

Introducción: El Formidable Reto del Cáncer de Páncreas

El cáncer de páncreas sigue siendo uno de los tumores más desafiantes y letales en el panorama oncológico global. Su diagnóstico a menudo tardío, su naturaleza agresiva y su tendencia a invadir estructuras vitales circundantes lo convierten en una enfermedad con un pronóstico generalmente sombrío. La única opción potencialmente curativa para el cáncer de páncreas es la extirpación quirúrgica completa del tumor. Sin embargo, una proporción significativa de pacientes son diagnosticados en etapas avanzadas, donde el tumor ya ha crecido más allá de los límites del páncreas, invadiendo estructuras críticas como vasos sanguíneos mayores (principalmente venas como la porta o la mesentérica superior) o arterias.

Históricamente, la invasión extensa de estos vasos sanguíneos ha sido considerada una contraindicación para la cirugía, clasificando a estos tumores como «inoperables» o «localmente avanzados no resecables». Estos pacientes eran relegados a tratamientos paliativos, principalmente quimioterapia y/o radioterapia, con el objetivo de controlar la enfermedad y mejorar la calidad de vida, pero sin una expectativa curativa. Esta limitación de la cirugía dejaba a un grupo considerable de pacientes sin la opción terapéutica más efectiva, contribuyendo a las bajas tasas de supervivencia asociadas a este tipo de cáncer.

Sin embargo, el campo de la cirugía oncológica pancreática está en constante evolución. Equipos quirúrgicos altamente especializados en centros de referencia están desafiando los límites tradicionales de la operabilidad, buscando nuevas estrategias para ofrecer una oportunidad quirúrgica a pacientes que antes eran considerados inoperables. En este contexto de búsqueda de soluciones, una nueva y compleja técnica quirúrgica implementada en el Hospital Universitario de Bellvitge (Barcelona) ha generado una nueva esperanza. Este enfoque pionero, que combina un tratamiento intensivo de quimioterapia preoperatoria con una cirugía radical que incluye la extirpación y reconstrucción de venas mayores afectadas por el tumor, está permitiendo operar con éxito a pacientes con cáncer de páncreas localmente avanzado que hasta ahora eran descartados para la cirugía.

Este artículo explora en detalle este avance significativo. Analizaremos por qué la invasión vascular ha sido tradicionalmente un límite para la cirugía pancreática, describiremos la innovadora técnica desarrollada y aplicada en Bellvitge, discutiremos los resultados preliminares y el impacto potencial para los pacientes, abordaremos los retos y riesgos inherentes a una cirugía tan compleja, y consideraremos las implicaciones de este enfoque para el futuro del tratamiento del cáncer de páncreas. El trabajo realizado en Bellvitge representa un cambio de paradigma potencial en el manejo de casos complejos de cáncer de páncreas, ofreciendo una nueva ventana de oportunidad para pacientes que enfrentan un diagnóstico difícil.

Los Límites de la Operabilidad Tradicional: Invasión Vascular y Complejidad Quirúrgica

La cirugía para extirpar un cáncer de páncreas, conocida como pancreatectomía (que puede ser total, parcial como la duodenopancreatectomía cefálica o procedimiento de Whipple, o distal), es en sí misma una de las operaciones más complejas en cirugía digestiva. El páncreas está rodeado por estructuras vitales, incluyendo el duodeno, el conducto biliar y, crucialmente, vasos sanguíneos mayores que irrigan y drenan los intestinos y el hígado: la vena porta, la vena mesentérica superior y las arterias mesentérica superior y hepática.

El Desafío de la Invasión Vascular:

La agresividad del cáncer de páncreas a menudo implica que, en el momento del diagnóstico, el tumor ya ha crecido e infiltrado estas estructuras vasculares cercanas. La invasión de estos vasos sanguíneos mayores presenta un desafío técnico formidable para el cirujano:

  • Riesgo de Hemorragia Incontrolable: Intentar separar el tumor de un vaso sanguíneo mayor invadido puede provocar hemorragias masivas y potencialmente fatales durante la operación.
  • Dificultad para Lograr Márgenes Limpios (R0): Para que la cirugía sea potencialmente curativa, es esencial extirpar todo el tumor visible y microscópico, logrando «márgenes de resección negativos» (R0). Si el tumor invade un vaso, es extremadamente difícil extirparlo completamente sin dejar células cancerosas residuales en la pared vascular, lo que aumenta drásticamente el riesgo de recurrencia.
  • Necesidad de Reconstrucción Vascular Compleja: Si se extirpa un segmento de una vena o arteria mayor junto con el tumor, es necesario reconstruir el vaso para restaurar el flujo sanguíneo a los órganos vitales (intestinos, hígado). Estas reconstrucciones vasculares son técnicamente muy exigentes y conllevan riesgos significativos de complicaciones postoperatorias (trombosis, fugas).

Debido a estos desafíos técnicos y los altos riesgos asociados, la invasión extensa de la vena porta, la vena mesentérica superior o la arteria mesentérica superior se ha considerado tradicionalmente un criterio de inoperabilidad. Los pacientes con tumores «localmente avanzados no resecables» eran aquellos cuyo tumor, aunque no se hubiera diseminado a órganos distantes (metástasis), estaba demasiado adherido o infiltraba estos vasos cruciales como para permitir una extirpación segura y completa (R0).

La Barrera Vascular

La invasión de vasos sanguíneos mayores como la vena porta o la mesentérica superior ha sido históricamente la principal barrera técnica que impedía la cirugía curativa en muchos pacientes con cáncer de páncreas, clasificándolos como inoperables debido al alto riesgo de hemorragia y la dificultad para lograr una resección completa del tumor.

Esta definición de «inoperabilidad» basada en la invasión vascular ha limitado las opciones para un número significativo de pacientes. Sin embargo, los avances en técnicas quirúrgicas, anestesia, cuidados intensivos y, crucialmente, en tratamientos sistémicos como la quimioterapia, han llevado a algunos centros de alta especialización a desafiar estos límites.

La Innovación de Bellvitge: Combinando Quimio Neoadyuvante y Resección Venosa Agresiva

El Hospital Universitario de Bellvitge, un centro de referencia en cirugía hepatobiliopancreática, ha desarrollado e implementado un enfoque pionero que está cambiando el paradigma para pacientes con cáncer de páncreas localmente avanzado y con afectación venosa grave, considerados tradicionalmente inoperables. Su estrategia se basa en una combinación cuidadosamente orquestada de tratamiento sistémico preoperatorio y una cirugía radical muy compleja.

Paso 1: Quimioterapia Neoadyuvante Intensiva

El primer pilar de la estrategia es la administración de un tratamiento de quimioterapia antes de la cirugía (neoadyuvante). A diferencia de la quimioterapia adyuvante (administrada después de la cirugía), el objetivo de la quimioterapia neoadyuvante en estos casos es múltiple:

  • Reducir el Tamaño del Tumor: La quimioterapia busca encoger el tumor primario y disminuir su contacto o invasión de los vasos sanguíneos circundantes, haciendo la posterior extirpación más factible y segura.
  • Eliminar Micrometástasis: El cáncer de páncreas tiene una alta tendencia a diseminarse tempranamente a través de micrometástasis (células cancerosas microscópicas) que no son visibles en las pruebas de imagen. La quimioterapia sistémica puede atacar estas micrometástasis ocultas en todo el cuerpo, reduciendo el riesgo de recurrencia después de la cirugía.
  • Seleccionar Pacientes Candidatos a Cirugía: La respuesta del tumor a la quimioterapia neoadyuvante puede servir como un indicador biológico. Los pacientes cuya enfermedad progresa a pesar de la quimioterapia intensiva probablemente no se beneficiarían de una cirugía agresiva. Aquellos que responden bien o cuya enfermedad se mantiene estable son los mejores candidatos para intentar la resección.

Este tratamiento preoperatorio es fundamental para «preparar el terreno» para la cirugía, intentando convertir un tumor inicialmente irresecable en uno potencialmente resecable.

Paso 2: Cirugía Radical con Resección Venosa Compleja

Tras completar la quimioterapia neoadyuvante y reevaluar la extensión de la enfermedad, los pacientes seleccionados son llevados a cirugía. La innovación clave del enfoque de Bellvitge reside en su disposición a realizar resecciones vasculares extensas y reconstrucciones complejas cuando el tumor sigue afectando significativamente la vena porta o la vena mesentérica superior.

Esto implica no solo extirpar el tumor pancreático, sino también el segmento de vena afectado, y luego reconstruir la continuidad venosa utilizando diferentes técnicas:

  • Resección Tangencial y Venorrafia: Si la invasión es limitada, se puede extirpar una parte de la pared venosa y repararla directamente.
  • Resección Segmentaria con Anastomosis Directa: Si se extirpa un segmento corto, los extremos de la vena pueden suturarse directamente.
  • Resección Segmentaria con Interposición de Injerto: Si se extirpa un segmento largo, se necesita un injerto (a menudo de una vena del propio paciente, como la yugular interna o la safena, o un injerto sintético) para puentear el defecto y restaurar el flujo.

Realizar estas resecciones y reconstrucciones vasculares en el contexto de una pancreatectomía es extremadamente complejo y requiere un equipo quirúrgico multidisciplinar con alta experiencia en cirugía pancreática, cirugía vascular y anestesia. El objetivo es lograr una resección R0 (sin tumor residual microscópico) incluso en presencia de invasión venosa significativa, ofreciendo así una oportunidad curativa.

Un Enfoque Combinado y Agresivo

La estrategia de Bellvitge combina quimioterapia neoadyuvante para reducir el tumor y eliminar micrometástasis, seguida de una cirugía radical que no se detiene ante la invasión venosa, sino que la aborda mediante resección y reconstrucción vascular compleja. Este enfoque de dos pasos busca convertir casos previamente inoperables en candidatos a una cirugía potencialmente curativa.

Este enfoque combinado y agresivo desafía los límites tradicionales de la operabilidad y representa un avance significativo en el manejo del cáncer de páncreas localmente avanzado.

Descripción Detallada de la Técnica Quirúrgica: La Complejidad de la Resección Venosa

La cirugía de resección pancreática con reconstrucción venosa es un procedimiento de alta complejidad que requiere una planificación meticulosa, habilidad técnica excepcional y un manejo perioperatorio experto. La técnica específica varía según la localización del tumor (cabeza, cuerpo o cola del páncreas) y el grado de afectación vascular, pero los principios generales son los siguientes:

Principios Quirúrgicos Fundamentales:

El objetivo principal es lograr una resección R0 (extirpación completa del tumor con márgenes microscópicamente negativos) mientras se preserva un flujo sanguíneo adecuado a los órganos vitales.

  • Control Vascular Proximal y Distal: Antes de abordar el tumor y la vena afectada, el cirujano debe obtener un control seguro de los vasos sanguíneos principales por encima y por debajo de la zona a resecar para minimizar el riesgo de hemorragia.
  • Disección Cuidadosa: Se realiza una disección meticulosa para separar el tumor de las estructuras circundantes, identificando claramente el grado de invasión de la vena porta y/o mesentérica superior.
  • Resección ‘En Bloc’: Si la vena está invadida, se extirpa el tumor pancreático junto con el segmento de vena afectado como una sola pieza («en bloc») para maximizar las posibilidades de obtener márgenes R0.

Técnicas de Reconstrucción Venosa:

Una vez extirpado el segmento venoso, la reconstrucción es crucial para restaurar el flujo sanguíneo portal (que drena el intestino y va hacia el hígado). Las técnicas más comunes son:

  • Anastomosis Directa (Termino-terminal): Si el segmento resecado es corto y los extremos de la vena pueden unirse sin tensión, se suturan directamente.
  • Interposición de Injerto: Si el espacio es demasiado grande, se utiliza un injerto para puentear el defecto. Los injertos pueden ser:
    • Autólogos: Venas del propio paciente (ej. vena yugular interna, vena safena mayor, vena gonadal). Son la opción preferida por menor riesgo de rechazo o infección.
    • Sintéticos: Injertos artificiales (ej. PTFE – politetrafluoroetileno). Se utilizan cuando no hay venas autólogas adecuadas disponibles, aunque pueden tener un mayor riesgo de trombosis o infección.
    • Aloinjertos (raro): Venas de donante cadavérico criopreservadas.

La realización de la anastomosis vascular (la sutura entre los extremos de la vena o entre la vena y el injerto) requiere una técnica microquirúrgica precisa para asegurar que no haya fugas y que el flujo sanguíneo se restaure sin estrecheces ni formación de coágulos (trombosis).

Requerimientos Multidisciplinares:

Este tipo de cirugía tan compleja solo puede realizarse de forma segura en centros de alto volumen y alta especialización como el Hospital de Bellvitge, que cuenten con:

  • Equipos Quirúrgicos Expertos: Cirujanos hepatobiliopancreáticos y cirujanos vasculares con amplia experiencia en resecciones complejas y reconstrucción vascular.
  • Anestesia y Cuidados Intensivos Avanzados: Anestesiólogos y intensivistas experimentados en el manejo de pacientes sometidos a cirugía mayor con potenciales pérdidas sanguíneas significativas y necesidad de soporte postoperatorio crítico.
  • Radiología y Patología Expertas: Radiólogos para evaluar con precisión la extensión vascular preoperatoria y patólogos para analizar los márgenes de resección intra y postoperatoriamente.

La capacidad de realizar estas cirugías con éxito y seguridad es un testimonio de la alta especialización y la coordinación multidisciplinar alcanzada en centros como Bellvitge.

Resultados Preliminares e Impacto Potencial en Pacientes

Aunque la implementación de esta técnica combinada de quimioterapia neoadyuvante y cirugía radical con resección venosa es relativamente reciente y se aplica a un grupo seleccionado de pacientes, los resultados preliminares reportados por centros como el Hospital de Bellvitge son alentadores y sugieren un impacto significativo en el pronóstico de estos casos complejos.

Tasa de Resecabilidad y Márgenes R0:

El objetivo principal de este enfoque es aumentar la tasa de resecabilidad (el porcentaje de pacientes con enfermedad localmente avanzada que finalmente pueden ser operados) y, crucialmente, la tasa de resección R0 (extirpación completa sin tumor residual microscópico). Los datos preliminares de Bellvitge y otros centros pioneros indican que, en pacientes cuidadosamente seleccionados que responden bien a la quimioterapia neoadyuvante, es posible lograr tasas de resección R0 comparables a las de pacientes con tumores resecables de inicio, incluso cuando se requiere una reconstrucción venosa compleja. Lograr una resección R0 es el factor pronóstico más importante para la supervivencia a largo plazo en el cáncer de páncreas.

Supervivencia y Calidad de Vida:

Al permitir una cirugía potencialmente curativa en pacientes que antes solo recibían tratamiento paliativo, este enfoque tiene el potencial de mejorar significativamente la supervivencia. Si bien se necesitan datos a más largo plazo para confirmar el impacto definitivo en la supervivencia global, los resultados iniciales sugieren que los pacientes operados con éxito mediante esta técnica pueden tener pronósticos mucho mejores que aquellos con enfermedad localmente avanzada no operada. La cirugía, aunque compleja, puede ofrecer la mejor oportunidad de control a largo plazo de la enfermedad. La calidad de vida postoperatoria también es una consideración importante, y aunque la recuperación puede ser larga, el objetivo es permitir a los pacientes retomar una vida activa.

Cambio de Paradigma en el Manejo:

Este enfoque representa un cambio de paradigma en el manejo del cáncer de páncreas localmente avanzado. Desafía la noción tradicional de que la invasión vascular extensa es una contraindicación absoluta para la cirugía. Abre la puerta a considerar la opción quirúrgica en un grupo más amplio de pacientes, siempre que sean cuidadosamente seleccionados, reciban un tratamiento neoadyuvante efectivo y la cirugía se realice en un centro con la experiencia y los recursos necesarios.

Una Nueva Esperanza para Pacientes Seleccionados

La técnica pionera de Bellvitge, al combinar quimioterapia preoperatoria y cirugía radical con reconstrucción vascular, ofrece una nueva esperanza a un grupo selecto de pacientes con cáncer de páncreas previamente considerado inoperable. Los resultados iniciales sugieren un aumento en la posibilidad de resección completa y un potencial impacto positivo en la supervivencia, marcando un avance significativo en el tratamiento de esta compleja enfermedad.

El impacto de esta innovación no se limita a los pacientes tratados en Bellvitge. Sirve como un referente para otros centros oncológicos, impulsando la adopción de enfoques más agresivos y multidisciplinares para el cáncer de páncreas localmente avanzado y fomentando la investigación continua en esta área desafiante de la oncología quirúrgica.

Tabla 1: Comparativa Simplificada de Enfoques para Cáncer de Páncreas con Afectación Venosa Grave

Característica Enfoque Tradicional Enfoque Pionero (Ej. Bellvitge)
Consideración de Operabilidad Generalmente considerado Inoperable / No Resecable Potencialmente Operable tras selección y neoadyuvancia
Tratamiento Principal Quimioterapia / Radioterapia Paliativa Quimioterapia Neoadyuvante + Cirugía Radical con Resección/Reconstrucción Venosa
Objetivo del Tratamiento Control de la enfermedad, paliación de síntomas Intención Curativa (Lograr Resección R0)
Complejidad Quirúrgica No aplica (considerado inoperable) Muy Alta (Requiere alta especialización)
Riesgos Quirúrgicos N/A Elevados (Hemorragia, Trombosis, Complicaciones postoperatorias)
Pronóstico Esperado Generalmente Pobre Potencialmente Mejorado (si se logra R0)

Nota: La selección de pacientes es crucial para el éxito del enfoque pionero.

Retos, Riesgos y Consideraciones: La Cara B de una Cirugía Agresiva

Si bien la técnica de resección venosa en cáncer de páncreas localmente avanzado ofrece una nueva esperanza, es fundamental reconocer que se trata de una cirugía de altísima complejidad asociada a riesgos significativos y que no es aplicable a todos los pacientes. La decisión de proceder con este enfoque requiere una evaluación cuidadosa y una discusión honesta entre el equipo médico y el paciente.

Riesgos Quirúrgicos Inherentes:

La manipulación y reconstrucción de vasos sanguíneos mayores en el abdomen conlleva riesgos inherentes:

  • Hemorragia Intraoperatoria: A pesar del control vascular, el riesgo de sangrado importante durante la cirugía es mayor que en pancreatectomías sin resección vascular.
  • Trombosis de la Vena Reconstruida: La formación de coágulos en la vena reconstruida (porta o mesentérica) es una complicación grave que puede comprometer el flujo sanguíneo al hígado e intestinos, requiriendo a menudo reintervención o anticoagulación intensiva.
  • Complicaciones Postoperatorias Generales: Como en cualquier cirugía pancreática mayor, existen riesgos de fuga pancreática, infección, retraso en el vaciamiento gástrico y otras complicaciones, que pueden ser más frecuentes o graves tras una resección vascular.

Selección Rigurosa de Pacientes:

No todos los pacientes con cáncer de páncreas localmente avanzado son candidatos a esta cirugía. La selección debe ser muy cuidadosa, considerando:

  • Respuesta a la Quimioterapia Neoadyuvante: Solo pacientes que muestran una buena respuesta o estabilidad de la enfermedad tras la quimio son considerados, ya que indica una biología tumoral menos agresiva.
  • Estado General del Paciente: Deben ser pacientes con un buen estado general de salud, capaces de tolerar una cirugía mayor y una recuperación prolongada.
  • Evaluación Radiológica Detallada: Estudios de imagen precisos para determinar la extensión exacta de la invasión vascular y la viabilidad técnica de la resección y reconstrucción.

Necesidad de Centros de Alta Especialización:

Debido a la complejidad técnica y los altos riesgos, esta cirugía solo debe realizarse en centros con un alto volumen de cirugía pancreática y vascular, que cuenten con equipos multidisciplinares experimentados y los recursos necesarios para manejar posibles complicaciones. La centralización de estos casos complejos en centros de referencia es clave para optimizar los resultados.

Cirugía de Alto Riesgo para Pacientes Seleccionados

La resección pancreática con reconstrucción venosa es una cirugía de alta complejidad y riesgo, no apta para todos los pacientes. Requiere una selección muy cuidadosa basada en la respuesta a la quimioterapia y el estado general del paciente, y debe realizarse únicamente en centros con la experiencia y los recursos adecuados para maximizar la seguridad y los buenos resultados.

La decisión de optar por este enfoque agresivo debe ser siempre individualizada, tras una discusión detallada de los potenciales beneficios (oportunidad curativa) frente a los riesgos significativos involucrados.

El Futuro de la Cirugía Pancreática Oncológica: Hacia Nuevos Horizontes

La innovadora técnica implementada en el Hospital de Bellvitge es un ejemplo de la continua evolución en el tratamiento del cáncer de páncreas, un campo donde la investigación y el desarrollo de nuevas estrategias son constantes. El futuro de la cirugía pancreática oncológica probablemente se moverá en varias direcciones:

  • Mayor Uso de Tratamientos Neoadyuvantes: La tendencia a utilizar quimioterapia y/o radioterapia antes de la cirugía (neoadyuvancia) probablemente se extenderá, no solo para casos localmente avanzados, sino también para tumores «borderline» (en el límite de la resecabilidad) o incluso resecables de inicio, con el objetivo de mejorar las tasas de resección R0 y tratar micrometástasis tempranamente.
  • Refinamiento de Técnicas Quirúrgicas Mínimamente Invasivas: La cirugía laparoscópica y robótica se está aplicando cada vez más a la cirugía pancreática, aunque las resecciones vasculares complejas siguen siendo un desafío para estos enfoques. El futuro podría ver un mayor desarrollo de técnicas mínimamente invasivas incluso para casos con afectación vascular.
  • Medicina Personalizada y Biomarcadores: La identificación de biomarcadores que predigan la respuesta a la quimioterapia neoadyuvante permitirá seleccionar mejor a los pacientes que se beneficiarán de enfoques quirúrgicos agresivos y adaptar los tratamientos sistémicos.
  • Centralización en Centros de Excelencia: Dada la complejidad, la tendencia será concentrar los casos de cirugía pancreática compleja en centros de alto volumen con equipos multidisciplinares especializados para mejorar los resultados y la seguridad del paciente.
  • Combinación con Nuevas Terapias Sistémicas: La integración de la cirugía con nuevas terapias dirigidas, inmunoterapia u otros enfoques innovadores en investigación podría mejorar aún más los resultados a largo plazo.

El enfoque pionero de Bellvitge es parte de este movimiento hacia un tratamiento más agresivo, multimodal y personalizado para el cáncer de páncreas, buscando ampliar los límites de la curabilidad para esta desafiante enfermedad. La investigación continua y la colaboración entre centros de excelencia serán clave para seguir avanzando en este campo.

Conclusión: Una Nueva Luz de Esperanza en la Lucha Contra el Cáncer de Páncreas

El cáncer de páncreas sigue siendo una de las neoplasias más temidas y con peor pronóstico. La limitación histórica de la cirugía curativa a aquellos casos sin invasión vascular significativa dejaba a muchos pacientes con enfermedad localmente avanzada sin una opción terapéutica potencialmente curativa. La innovadora estrategia implementada por el equipo del Hospital Universitario de Bellvitge, combinando quimioterapia neoadyuvante intensiva con cirugía radical que incluye resecciones y reconstrucciones venosas complejas, representa un avance significativo y una nueva esperanza para este grupo de pacientes.

Este enfoque desafía los dogmas tradicionales de operabilidad y demuestra que, en manos expertas y en pacientes cuidadosamente seleccionados, es posible lograr una extirpación completa del tumor (R0) incluso en presencia de afectación vascular grave. Los resultados preliminares son alentadores y sugieren un potencial para mejorar la supervivencia en un grupo de pacientes que anteriormente tenían opciones muy limitadas.

Sin embargo, es crucial recordar la alta complejidad y los riesgos inherentes a este tipo de cirugía agresiva. La selección rigurosa de pacientes y la realización de estos procedimientos únicamente en centros de alto volumen y alta especialización son fundamentales para garantizar la seguridad y optimizar los resultados. La técnica de Bellvitge no es una solución universal, pero sí una herramienta poderosa para un grupo selecto de pacientes.

El trabajo pionero realizado en Bellvitge y otros centros de excelencia impulsa el campo de la cirugía oncológica pancreática hacia adelante, fomentando un enfoque multimodal más agresivo y personalizado. Sirve como inspiración para continuar investigando y desarrollando nuevas estrategias que permitan ofrecer mejores resultados y una mayor esperanza a los pacientes que enfrentan el formidable desafío del cáncer de páncreas. Este avance, aunque técnico y complejo, se traduce en la posibilidad real de cambiar el curso de la enfermedad para pacientes que antes no tenían esa opción.

Publicado el 5/7/2025

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